En
la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F), nos
sumamos un año
más a la celebración del Día Mundial para la
Seguridad y Salud en el Trabajo. CSI-F se
congratula de todos los
avances conseguidos que han logrado que los trabajadores desarrollen
su labor de manera más segura y con menor riesgo para su salud.
Durante
años el foco de atención principal han sido determinados sectores
como el de
la construcción que mantenían índices de
siniestralidad laboral insostenibles. Realizadas
importantes mejoras
en cuanto a prevención de riesgos laborales en estos sectores, no
debemos dejar a un lado la prevención en un tipo de trabajo tan
importante como el de los
servicios a la ciudadanía que prestan los
empleados públicos.
En
los últimos años se han producido importantes recortes, mal
llamados reformas, en
todas las Administraciones Públicas; Central,
Autonómicas y Locales. Estos recortes han
producido cambios
significativos en el ámbito laboral que hacen que surjan nuevos
riesgos
laborales y que reaparezcan algunos que parecían ya
controlados. Especial atención
debemos prestar a los riesgos
psicosociales que van en aumento en la Administración
Pública por
las precarias condiciones laborales en las que muchos empleados
públicos
desarrollan su trabajo. Exigimos por tanto una evaluación
eficaz de las condiciones de trabajo,
incluyendo las relativas a la
organización y ordenación del mismo teniendo en cuenta los
riesgos
psicosociales y aplicando las consecuentes medidas preventivas y
correctivas en los
centros de trabajo. Exigimos también tanto a las
empresas como a la Administración, la
máxima protección a los
trabajadores que sufren agresiones tanto físicas como verbales y
que no pueden desempeñar su trabajo en condiciones de libertad y en
espacios sin violencia.
En
CSI-F vamos a seguir trabajando a través de nuestros delegados de
prevención
en conseguir espacios laborales saludables donde la
prevención de riesgos esté integrada
en la cultura de la
organización. Esta tarea, se nos presenta más difícil si cabe,
tras los
recortes del Real Decreto 20/2012, en materia de Prevención
de Riesgos Laborales. Este Real
Decreto supone la disminución de
delegados de prevención en la AGE. Desde CSI-F,
entendemos que las
debilidades encontradas en la prevención de la AGE; no radican en
los
números de Comités ni en el número de delegados, sino en la
falta de recursos humanos y
materiales y en la falta de compromiso
por parte de la Administración, ya que en muchos
casos son los
delegados de prevención los que llenan de contenido la actividad de
los Comités
de Seguridad y Salud, con las iniciativas, actuaciones
y propuestas que realizan. Por el
contrario existen aspectos
mejorables en la actual estructura preventiva de la AGE, que pasan
más por la formación de los miembros de los Comités de Seguridad y
Salud y no tanto por el
número de Comités y de delegados.
Esto
será un gran retroceso que dificultará de manera notable el trabajo
que desempeñan
los delegados de prevención. Instamos a la
Administración a buscar espacios de
entendimiento ya que está
demostrado que los espacios donde los delegados sindicales y de
prevención desarrollan su trabajo son siempre espacios más seguros
y saludables. CSI-F
pide un esfuerzo por mantener la actual
estructura preventiva de la AGE, porque de lo contrario
esta medida
supondrá un paso atrás en lo ya andado en materia de prevención
hasta la fecha.
CSI-F
seguirá apostando por la formación y la cualificación de los
delegados de prevención como
una de las fortalezas con las que
cuenta la Prevención de Riesgos Laborales.
NO
BAJES LA GUARDIA, ACTÚA EN PREVENCIÓN
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